Con respecto al año 2010 hubo un incremento del 3.4% del precio de los alimentos, nivel más alto alcanzado desde que la FAO comenzara la medida de los precios alimentarios en 1990.
Esta subida del precio se ha notado en todos los productos básicos, a excepción de la carne que permaneció invariable.
Según el Índice de la FAO para los precios, por productos encontraríamos:
· Cereales: Estos han experimentado un aumento del 3% con respecto a diciembre de 2010; nivel más alto desde julio de 2008 en el cual se encontraba un 11% por encima. Esta subida refleja el incremento de los precios internacionales del trigo y del maíz.
· Aceites y Grasas: Sufrieron un aumento del 5.6% acercándose así al record de junio de 2008.
· Lácteos: Experimentaron una subida del 6.2%, aunque aun así no alcanzo el 23.2% de noviembre de 2007.
· Azúcar: Tuvo un aumento del 5.4%. Los precios siguen siendo altos empujados por un recorte de la oferta de azúcar a nivel mundial
· Carne: Permaneció estable. El descenso de los precios de Europa provocado por la falta de confianza de los consumidores se compenso con un ligero aumento de los precios de las exportaciones en Brasil y Estados Unidos.
El economista de la FAO y experto en cereales Abdolreza Abbassian afirmo: “Estos precios altos pueden persistir en los próximos meses. El alza de los precios de los alimentos supone una grave preocupación, en especial para los países de bajos ingresos y con déficit de alimentos, que pueden tener dificultades en financiar sus importaciones alimentarias, y para familias pobres que gastan un porcentaje de sus ingresos en alimentos”.
A raíz de esta afirmación del economista de la FAO, vemos como también el Banco Mundial ratifica esta afirmación, indicándonos que los países de ingresos bajos y medios están experimentando niveles de inflación en los precios de los alimentos de un 5% más alto en comparación con los países de ingresos mayores.
Esta inflación se ha notado más en la región del Oriente Medio y el Norte de África, donde la inflación es de dos dígitos en el costo de los alimentos; la explicación de esta gran inflación la encontramos en los canales de comercialización, los cuales no tiene la capacidad para absorber las grandes fluctuaciones de precios, unido a que los gobiernos de estos países tienen una limitada habilidad para proteger a los consumidores internos de las alzas de los mercados internacionales.
Se deben llevar a cabo una serie de medidas macroeconómicas para mantener el tanto del alza de los precios de los productos básicos. Estas medidas de políticas serian relajar los mandatos a los biocombustibles cuando los precios de los alimentos excedan de un determinado umbral y retirar las restricciones de las exportaciones.
Otra serie de objetivos normativos a medio plazo para mejorar la seguridad alimentaria, aumentando así el rendimiento agrícola, y hacer un uso mayor de herramientas de gestión de riesgo como productos de cobertura.
El precio mundial de los alimentos continua siendo volátil, sobre todo con los últimos acontecimientos acaecidos en Oriente Medio (aumento del precio del petróleo en un 21%) y en Japón. Estos acontecimientos han llevado a una bajada del precio del maíz, soya y trigo.
Las causas de estas variaciones de precios, son variadas. Tras la crisis de 2008, las buenas cosechas de la mayoría de los alimentos básicos hicieron que los precios bajaran.
Pero en 2010, un clima inclemente (inundaciones, sequias, incendios…) perjudico el abastecimiento, llevando a un alza de los precios de casi un 20% comparado con el año anterior, de acuerdo con la FAO.
Por otro lado el precio de los alimentos también se ve afectado por el aumento del precio del petróleo, al alzarse el costo de producción y del transporte. También se promueve el uso de alimentos como el maíz, aceite comestible y azúcar, para producir biocombustible.
Una subida del 10% en el precio del petróleo se asocia a un alza de 2.7% en el índice de precios de los alimentos.
Según la Organización Internacional de promoción del desarrollo y lucha contra la hambruna Oxfam, los precios de los alimentos básicos se van a duplicar para el año 2030 a menos que los gobiernos tomen medidas.
Oxfam propone a los gobiernos medidas urgentes para atajar el problema; como aumentar la transparencia en los mercados de materias primas y regular los mercados de futuro de productos agrícolas. Para ello pide a los líderes mundiales que se reunirán en la nueva cumbre sobre el cambio climático en Suráfrica el próximo diciembre, que lancen un fondo especial que ayude a los habitantes del planeta a protegerse mejor del impacto negativo y los prepare mejor para cultivar los alimentos que precisen.
Tras este análisis del precio de los alimentos básicos, solo me queda decir que realmente el alto precio de los alimentos, afectara como siempre a los mismos.
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